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Saturday, September 14, 2013

Miguel y los Nuevos Cuentapropistas en Cuba

 Alguien se recuerda la ofensiva revolucionaria del ano 1961? Cuando se quitaron todos los pequeños negocios al cubano. Hoy quiero contarle la historia de un cubano, Santiaguero, al cual también le intervinieron todas sus propiedades.
  Miguel, tenía dos bodegas de venta de alimentos, "El Almacencito" y "Casa Vivio"  y una Panadería "La Neida", todas en el reparto Asunción.
  Después que le intervinieron sus propiedades de forma cínica el gobierno revolucionario le ofreció el trabajo de estibador, cargador de sacos, en la terminal de carga y descarga de barcos, Terminal Mambisa, en la misma ciudad de Santiago de Cuba.   Miguel trabajó como cargador de sacos apenas unos días y no pudo resistir lo duro de dicho trabajo y se fue a vivir con sus padres al campo.
  Hoy se vuelven a permitir a los cubanos tener pequeños negocios y las bodegas y panaderías todavia se mantienen en pie. El gobierno comunista jamás reparo ninguna de las propiedades y todavia la siguen utilizando. Apenas producen ni ofrecen ningún servicio al pueblo. La miseria y el hambre ha impedido al gobierno comunista prestar la mas mínima satisfacción de ninguna necesidad alimentaria del pueblo.
 Los altos impuestos a los cuentapropistas así como una serie de medidas impositivas anacrónicas han permitido que los pequeños negocios en Cuba sean otro gran fracaso del régimen. No existen materia prima, las que se encuentran tienen gran precio, además hay que comprarlas ilegalmente.  No existe garantía legal del negocio, el gobierno puede derogar las leyes en cualquier momento e intervenir tu propiedad sin derecho a reclamación.
  Los cuentapropistas se han defendido de varias maneras muy creativas, la mas evidente es la falsificación de la declaracion de impuestos que conllevan a una menor recoleccion de fondos publicos y una prolongacion del circulo moral degradante que ha creado la robolucion comunistas al forzar masivamente al pueblo a mentir, robar y vivir de las mas ingeniosas ilegalidades.  Es imposible vivir en Cuba de forma honesta, trabajando y viviendo del fruto de tu trabajo.